La elegancia y practicidad de un panel japonés
La elegancia y practicidad de un panel japonés
supone para las viviendas que han optado por este sistema una forma de decoración particular.
Elegante por los propios diseños, mayoritariamente verticales y bordados.
Practicidad o prácticos por que al ir dotado de un mecanismo similar a una guia o riel hacen de esta forma que se puedan abrir y cerrar, con toda clase de facilidad.
Un panel japonés hace de los espacios
lugares peculiares indicados para todas las habitaciones en principio, aunque si usamos estancias más grandes podremos contemplarlos y decorarlos con más «pompa».
Ello
no le resta importancia al panel japonés
pues hay desde dos vias o láminas con las tiras tradicionales cada una de 80 centímetros hasta incluso las seis tiras para habitaciones más amplias.
La infinidad de modelos y las combinaciones son ilimitadas ya que pueden ser tiras de un mismo dibujo o combinar telas lisas con estampados sinuosos, con estampados orientales, estampados a rayas.
El panel japonés está en el medio, en el instante supremo. Entre la cortina tradicional y los nuevos diseños; antes nacieron los estores que siguen ahí formando parte de la moda como un clásico, aunque en principio eran más isleños y propios de las costas.
Decidirse por un panel japonés es una elección acertada.